Casa RM

La pampa y el mar se caracterizan por ser paisajes extensos y horizontales cuyos límites se diluyen en el horizonte. La casa se plantea en el encuentro difuso donde conviven ambos paisajes. Entendiendo su posición física, se pretende a través de la casa experimentar ambos paisajes, planteándose en consecuencia un área común con expansiones y visuales hacia el campo y el mar. Reforzando la idea de focalizar dichos paisajes, y como protección del viento constante del norte y las tormentas del sur, se organizan los espacios exteriores para convivir con las distintas cualidades de cada orientación. El área de expansión del mar es descubierta para poder captar el sol los días que el clima lo permite, y la del campo es semi cubierta para protegerse del sol y los vientos predominantes de la zona.